Entradas

'Autorretrato'

Imagen
Los recuerdos de mi infancia son vagos, fugaces, a veces dudo abrir el olvidado cajón. Muchas partes están cubiertas por antifaces para así proteger mi dañado corazón. Vivir para morir, morir por haber vivido; es algo que ronda por mi aún joven cabeza, que le parece poco todo lo que ha sufrido a manos de personas de muy poca braveza. Las palabras de mi madre las sigo escuchando, que me repetían que soy fuerte, más que ninguno, que no debía dejar de continuar luchando para que de mis problemas no quedase ni uno. Mi carácter es fuerte, a veces algo explosivo, pero también dulce, tierno y cariñoso, debido a que yo por quien más quiero me desvivo y todo lo que yo expreso resulta armonioso. Me encanta discutir, me tachan de cabezota pues incluso errando tengo que tener razón. Soy el tipo de persona que fácil se alborota pues mi alma está rota, al igual que mi corazón. Nunca destaqué por tener gran habilidad, tampoco por ser particularmente ingeniosa, pero sí menci

Frankestein o el moderno Prometeo del siglo XXI. Octava y última carta

A Blanca, Italia 12 de junio de 20... Bueno, han pasado ya 7 días (una semana) desde mi marcha, y espero que todo esté yendo genial por allí. Aquí en Santander las cosas están como siempre. Rubén Roiz, el chico al que le escribía cartas a menudo y del cual te hablaba bastante, llega a la ciudad en 9, así que estoy como una niña pequeña para que llegue el día 21 de una vez. Lo que te comentaba, espero que todo por allí te vaya genial, porque no son exactamente buenas noticias las que tengo que darte... Primero, creo que tengo que darte las gracias por todos los momentos que hemos vivido juntas, que por suerte no son pocos, y estoy segura que sin ti no sé qué hubiese sido de mi desde un principio, ya que eras mi única amiga allí en Milán y me ayudabas con Física, así que espero que mi presencia te haya ayudado para crecer como persona, porque yo confío en ti, confío en que puedas encontrar a alguien que pueda reemplazarme, porque te lo mereces, te mereces encontrar a alguien q

Frankestein o el moderno Prometeo del siglo XXI. Séptima carta

Al señor Roiz, España 4 de junio de 20... Lamento haber tardado 2 meses en volver a escribirte, pero es que no ha pasado nada interesante ni fuera de lo común, además de que hasta ayer no me dieron las notas, por lo que no había nada que contarte. Blanca está muy bien adaptada, aunque la veo bastante triste y desanimada, como si le faltase algo que la haga sonreír; como lo que sentí yo poco después de tu marcha, esa sensación de vacío que sabes que, por mucho que intentes llenarlo, no se llenará de ningún modo. Esa sensación que uno tiene al ver un perro abandonado, un niño huérfano o el desaliento de un amor no correspondido. No contesta a mis dudas con el mismo ímpetu de siempre, o no sonríe al ver el atardecer. Una de mis teorías es que está desalentada por el hecho de mi marcha, pero sé que conocerá a gente genial que sea capaz de reemplazarme una vez yo ya no esté allí.  De todos modos, la escribiré cuando esté en Santander de nuevo... Por otro lado, mis notas han

Frankestein o el moderno Prometeo del siglo XXI. Sexta carta

Al señor Roiz, España 2 de abril de 20... Siento haber tardado tanto en poder escribirte, pero bueno, he estado demasiado absorbida por el tema de la creación de la criatura, a la cual he nombrado "Blanca" por la palidez de su tono de piel. De hecho, hace 3 días que la pude dar vida gracias a la fuerte tormenta que hubo el pasado 30 de junio; y por si te lo preguntas, ahora mismo ella está dando un paseo por los jardines de la residencia, esperando a que termine de escribirte para poder así ir las dos a caminar por la ciudad, aún desconocida para ella. Y a pesar de que no va a clase, me ayuda bastante con los temas de física, que es la asignatura que más me cuesta ya que no me gusta nada, y gracias a ella voy obteniendo mejores notas. Por desgracia en 2 meses tendré que dejarla aquí en Milán valiéndose de sí misma, pero la he incitado a empezar a la Universidad, puesto que me comentó que la gusta mucho aprender y yo la veo bastante entusiasmada y animada cuando me ex

Frankestein o el moderno Prometeo del siglo XXI. Quinta carta

Al señor Roiz, España 28 de febrero de 20... Hace ya 15 días de mi última carta, y he de admitir que mi proyecto está avanzando a una velocidad bastante rápida. Tras hacer varios bocetos sobre qué forma me gustaría que tuviese mi criatura, me decidí por el más sencillo pero agradable de los cuatro presentados. Éste se trata de una criatura de sexo femenino, con pelo liso pero no muy largo, que llegue un poco más abajo de los hombros, de color castaño claro. Sus ojos serán de color avellana, con algún punto verdoso, como los de mi madre, así en parte cada vez que la mire a los ojos, pueda ver en ellos a la mujer que más amo, y me inspire tranquilidad y armonía. Será algo más alta que yo, 1,70 metros, puesto que es más fácil trabajar sobre criaturas de mayor tamaño, debido a que eso facilita el trabajo con articulaciones o nervios pequeños (ya que en este caso, serán algo más grandes).  He decidido que fuese mujer y no hombre debido a que así puede que me comprenda mejor, ya que

Frankestein o el moderno Prometeo del siglo XXI. Cuarta carta

Al señor Roiz, España 13 de febrero de 20... ¡No aguanto más en este sitio! Estoy solísima, nadie me habla, parezco invisible, un espíritu que vaga perdido por los pasillos de una facultad desconocida, con la cabeza rebosante de información. Si tan sólo pudiese encontrar a alguien... He estado leyendo varios libros de anatomía, los que me recomendó Isabella, que me encantan, me parecen interesantísimos y me enseñan muchísimas cosas de las cuales no había oído hablar. Además, como ya te comenté, he leído ya un libro de terror, Frankenstein , y me ha llegado... En parte me siento identificada con el científico Víctor, y me parece bastante admirable el hecho de haber conseguido tal objetivo de dar vida a lo inerte. Quizá, y tan solo quizá, en un futuro planee algo parecido, pero sin el tan fatal final que se muestra en el libro. De hecho, voy a ponérmelo como meta, sí, sería algo increíble el poder conseguirlo. Mañana mismo empezaré a repasar todo lo necesario para realizar

Frankestein o el moderno Prometeo del siglo XXI. Tercera carta

Al señor Roiz, España 8 de febrero de 20... Hola grandullón. Te escribo desde Milán. Así que sí, aunque con cinco días de retraso, aquí tienes la tan esperada carta.  Como ya ves, me concedieron la beca sin ningún problema. Ya me he instalado en la residencia de la Universidad, y me he presentado a algún profesor. Sólo he tenido tres conferencias en el tiempo que llevo aquí, en las cuales te explicaban las reglas de la facultad, algún profesor explicaba sus criterios de evaluación y nos mostraban el calendario escolar de este curso. Mi profesora de Anatomía, Isabella, ha quedado bastante impresionada con mis conocimientos (estuvimos manteniendo una charla a modo de presentación) en la que yo le contaba algunos de libros que me he dedicado a leer desde mi infancia hasta ahora, y ella me ha recomendado otros tantos, los cuales iré a buscar a la biblioteca en cuanto acabe la carta. En cambio, mi profesor de bioquímica, Francesco, no está tan contento conmigo. Me exp